Hoy, estoy dispuesta a combinar. Lo elegante, se adecua a mi necesidad de sentirme relajada, única y a la moda… El mundo, hoy, se adecua a mí. Meto mi camisa en el pantalón de tiro alto, coloco mis gafas en su lugar y mirándome al espejo, me convierto en la mezcla perfecta de formas, tendencias y clásicos… Me convierto en mi propio estilo

Domingo… Un día sin “hacer nada”, pero deseo “hacer todo”. Una tarde, en donde mi vestuario se deja llevar por la intuición de ser cómodo y donde una silueta holgada, se convierte en el sinónimo perfecto de mi nombre… Una composición perfecta de zapatos bajos, camiseta por fuera y shorts cortos, concluidas en tendencias deportivas marcadas por mi estilo.

Hoy tomo el riesgo de ser una mujer dispuesta a llamar la atención. Me compongo de combinaciones mezcladas en una sola gama y la elocuencia de los estampados que este día son solo míos. Para mí, hoy me defino a través de una mujer que mete su blusa entre la pretina y se coloca un saco en el colage de la elegancia.

Me encuentro en una tarde verdaderamente prometedora. Hoy es un día, en donde estoy contextualizada con mi comodidad y conforme con la moda… Es el sábado perfecto para salir de compras, finiquitar compromisos, tener un almuerzo con mis amigas o divertirme en el cine. Hoy, la mujer que se mira en el espejo es el resultado indicado para la suma correcta. Hoy, solamente me hago una cola alta y levanto mi bolso. Definitivamente hoy, solo dejo mi camisa por fuera y escojo esos necesarios zapatos bajo

Mi armario, está compuesto por presentes y futuros fantasmas de antiguas pasarelas. O por lo menos, eso demuestra la revista que leo en compañía de un café y las más simples y cómodas prendas… -suspiro- si en estos momentos, alzara la vista, en el reflejo del vidria del “Café”, probablemente vería una chicha, con la combinación adecuada de la composición perfecta.

Hoy soy la leve combinación del color, con los necesarios estampados. Hoy me siento preparada para cualquier ocasión y oportuna en cualquier momento. Hoy no solamente conservo la moda, sino que guardo mi estilo, mantengo la “clase y sostengo las tendencias.

La definición de mí “viernes casual”, se sustenta en COMODIDAD. Hoy es la mañana en que me siento en mi “oficina” a esperar la noche mientras pasa el día; el chocolate me acompaña, el celular suena y unos buenos jeans se roban el protagonismo de la tendencia que necesitaba, junto a mí blusa favorita, lo mejores zapatos y la moda en mi chaqueta.

¿Porque no ser irreverente? Hoy estoy decidida a intentarlo. Todo se basa en el beneficio de mi cuerpo, las mezclas perfectas-imperfectas y el convencimiento de que luzco única. Este día, convierto a las tendencias en mis aliadas, siendo lo que siempre oculto y mostrando lo que miro al espejo. Hoy, definitivamente tomo el riesgo de hacer moda.

Un buen lunes, inicia con el mejor tono para el despertador, una sonrisa oportuna, la infaltable “taza de café” y un armario a disposición de tu ánimo. Hoy, todo se condensa en la necesidad de sentirme relajada, el deseo de ser elegante y la seguridad de conservar mi estilo. Así que, en el repaso de mis prendas, el pantalón de tiro alto me acompaña, los tacones no me abandonan y la nueva blusa se queda.

Perfecta para la mitad de la semana, o por lo menos así me siento. Hoy, el estilo es el adecuado y justo lo que necesitaba; las prendas holgadas se repiten, los estampados ahora forman de las piernas y nunca había estado tan agradecida por unos zapatos bajos... Es hora de irse, recoger mi cabello, y prepararme para largas filas, acumuladas diligencias y el “pan dulce” de la tarde.

Una tarde dedicada a mí… Eso es este día, horas y horas impuestas en mis deseos y en la sencilla belleza de ser yo. Los clásicos jeans impregnados en la eternidad de mi closet, una blusa dispuesta a no opacarme, un color que resalta mis palabras y la nueva adquisición en el riesgo de comprar chaquetas. Hoy soy, quien está dispuesta a dejar ser.

Amigas, comida y cine; el sinónimo de perfección encarnado en horas. Hoy más que nunca, me visto por y para mí, hoy más que nunca estoy dispuesta a divertirme… Pero sobre todo, hoy más que nunca me pongo la falda, disfruto la moda y capto las tendencias.